Boudou gastó 141 mil pesos en amoblar su despacho
Según se desprende de la documentación oficial, el vicepresidente pagó
141 mil pesos para comprar muebles y luminarias para su oficina.
Un escritorio italiano, un juego de mesa y sillas de diseño, una nueva
iluminación y “artefactos fijos”. Por esos cuatro ítems, el vicepresidente
Amado Boudou pagó 141.975,09 para redecorar su despacho en el Senado, a
comienzos del 2012.
La información se desprende de las disposiciones internas emitidas por
la Dirección de Contaduría de la Cámara alta que autorizaban los gastos, según
publicó el diario La Nación. Las mismas llevan la firma del titular del área,
Sergio Gabriel Domínguez.
Las mismas autorizan al titular del Senado a utilizar para esos gastos
dinero del fondo rotatorio, una suerte de “caja chica” que había sido ampliada
por el propio Boudou al momento de avanzar con las reformas en su despacho.
La disposición 322 autoriza la compra de un ejemplar del escritorio
“Nomos”, fabricado en Italia y diseñado por el reconocido arquitecto inglés
Norman Forster. Por el mismo se pagaron 42.765,83 a la firma Zanotta
Sudamericana S.A.
En tanto, la disposición 440 consigna la “adquisición de sillas
Aluminum y mesas circulares” creadas por el afamado Charles Ames. La Colección
Sociedad Anónima Comercial Industrial Financiera percibió 37.496,38 por la
transacción.
Además, la disposición 388 detalla la “adquisición de artefactos fijos”
al particular Claudio Alejandro González por 46.356,58 de pesos.
Por último, la disposición 448 permite el pago de 15.356,30 por
luminarias a la empresa Iluminación Agüero Sociedad Anónima.
Boudou maneja una “caja chica” de $ 500 mil sin control
A poco de llegar a la Cámara, eliminó regulaciones. Y tras eso reformó
su despacho. El fondo lo controla su operador político.
Mediante la firma de un decreto, el vicepresidente, Amado Boudou,
modificó el control del “Fondo rotatorio”, la “caja chica” del Senado de la
Nación para, por lo menos, poder reformar su despacho.
Desde febrero, Boudou puede gastar, casi sin control alguno, hasta 100
mil pesos por erogación y si se trata de un gasto relacionado a un mismo objeto
tiene entre 400 y 450 mil pesos anuales. El fondo cuenta con un presupuesto
anual de 2.000.000 de pesos.
El 1 de febrero de 2012, Boudou firmó el decreto 0095/12 en el que se
solicitó la “adecuación de la regulación del fondo rotatorio”.
Lo primero que tuvo que hacer fue dejar sin efecto un decreto firmado
por el actual gobernador bonaerense, Daniel Scioli, en el que impedía que los
gastos del fondo rotatorio se utilicen para reformas edilicias o construcciones.
Los decretos 604 y 1.039 de Scioli, ambos de 2004, imponían una serie
de pasos regulatorios y limitaban los gastos a 50 mil pesos por erogación.
Boudou, por el contrario, duplicó los gastos y eliminó restricciones.
Según el artículo tres del decreto firmado por el Vicepresidente se
autoriza al responsable del fondo rotatorio a prestar la conformidad “con el
gasto a realizar con cargo al mencionado fondo cuyo monto oscile entre pesos
cincuenta mil uno ($ 50.001) y pesos cien mil ($ 100.000) y a ordenar luego el
pago, en un lapso no menor a tres meses entre cada erogación, en el supuesto
que ésta se encuentra vinculada a un mismo objeto”.
La norma es particular si se tiene en cuenta que el “responsable del
fondo” es Juan Zabaleta, mano derecha de Boudou, operador político y secretario
administrativo del Senado de la Nación.
El mismo decreto determina que el uso de la caja chica sólo será
autorizado en casos que revisten carácter de “urgente y/o resulten necesarios
para paliar situaciones de emergencia”. El control de estos gastos es nulo, ya
que es el mismo Zabaleta el que debe analizar si los gastos se aplican a la
normativa vigente que ellos mismos modificaron.
El mismo día que Boudou preparó el camino con el manejo del fondo
rotatorio, se autorizaron los gastos para la reforma de su despacho.
El decreto 104/12 autoriza la contratación “para realizar los trabajos
referidos a las oficinas, despachos y locales de servicio del área de
Presidencia de este Honorable Senado, por un monto total de pesos noventa y
seis mil seiscientos cuarenta ($ 96.640)”.
No es casual que por una diferencia de $ 3.360 los gastos de reformas
no superen los 100 mil pesos que son los que autoriza el propio Zabaleta. El
decreto 104 afirma que se adjuntan tres presupuestos sobre las obras de
remodelación. Esos documentos no fueron publicados y no son de libre acceso.
Las refacciones que realizó Boudou en su despacho a las cuales
consideró “urgentes” incluyeron la
supuesta instalación de un jacuzzi, que nunca confirmó o rechazó.
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